Saber cómo se aparean los caballos para dar lugar a una nueva vida, nos recuerda lo hermosa y sabia que es la naturaleza. Este conocimiento nos permitirá mantener un adecuado método de crianza y reproducción equina.
Aquí conoceremos como se desarrollan los procesos del celo, apareamiento, gestación y parto, tanto desde un punto de vista fisiológico como desde una óptica comportamental de la yegua y el semental.
Vamos a ver acerca de la reproducción de forma natural, es decir cuando están los caballos en libertad o estado salvaje.
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¿Cómo se aparean los caballos?
Existen dos tipos de manadas que justamente se agrupan en torno a su actividad sexual.
Una manada típica consiste en un semental dominante con un harén de 3-7 yeguas con sus potros y potrancas.
El otro tipo de manada está compuesto por potros que han sido expulsados cuando ha empezado su etapa reproductiva (aprox. a los 2 años de edad). Estos competirán con sus congéneres y formarán sus propios grupos familiares cuando hayan adquirido la fuerza y virilidad necesaria. (5-6 años de edad).
Para evitar la endogamia y garantizar la diversidad genética, al igual que los potros, las potrancas de 2 años también serán separadas de la manada e irán a formar parte de otros harenes.
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El Celo de las Yeguas
El ciclo reproductivo inicia con el celo de las yeguas, que tiene una duración de 4-7 días, produciéndose la ovulación un día antes de terminar.
Este celo se da cada 21 días, principalmente en la época de primavera y verano (por esta razón se dice que las yeguas son poliéstricas estacionales). Hay que tomar en cuenta que la gestación dura 11 meses por lo que el potrillo nacerá al año siguiente en la temporada más benévola del año. Esta es una estrategia de la naturaleza para asegurar la supervivencia del potrillo y el mantenimiento de la especie. En países de clima cálido el celo de las yeguas podría darse en cualquier mes del año.
El Cortejo y Apareamiento de caballos
En el ritual del cortejo la hembra da una serie de señales que indican al macho que está receptiva. Inicialmente se quedará quieta y mostrará su vulva abriéndola y cerrándola varias veces. Además suelen orinar de forma corta y repetida, con un olor característico del celo (Se dice que el macho detecta las feromonas de una hembra en celo a más de un kilometro de distancia).
Ante estas señales, el macho se aproxima, olfatea el aire levantando el labio superior enseñando los dientes (respuesta de flehmen) y eventualmente relincha. Luego empieza un “baile” de cortejo, mostrándose majestuoso, tratando de aparentar mayor volumen corporal y fortaleza, con el cuello arqueado y dando manotazos sobre el suelo. Este ímpetu se debate entre la atracción sexual y el temor al rechazo, temor que será atenuado cuando confirme que las señales de la yegua son positivas.
Posteriormente se acerca más a ella, normalmente por un costado para evitar coces, pudiendo restregarse o morder su cruz. Si la yegua se queda quieta y el macho consigue acercarse a las partes laterales de su vientre, pronto podrá montarla.
El semental se excita aún más si la yegua hace a un lado la cola y de forma sumisa permite el paso libre.
La cópula es breve (aprox. 1 minuto o menos) y después se separan para volver a juntarse varias veces durante el día, asegurándose así la fecundación.
La Gestación
Cuando la yegua ha sido fecundada deja de tener señales del celo y su comportamiento es más relajado.
La gestación de la yegua dura aproximadamente 340 días pudiendo adelantarse a retrasarse unos 20 días. Parece ser que en las yeguas salvajes la gestación puede alargarse un poco más de tiempo.
El Parto
Un síntoma visible de que el parto está próximo es el crecimiento de las glándulas mamarias. Este desarrollo se da unas 3 o 4 semanas antes del parto, y es más notorio en las yeguas multíparas (que ya han tenido crías) que en las primerizas.
El signo más evidente es la formación de un botón de cera en los pezones, que aparece 24 horas antes del parto y sirve también para evitar que ingresen agentes infecciosos.
El parto suele darse antes del amanecer porque ese momento los depredadores se meten a sus guaridas y la yegua y su potro corren menos riesgos.
Etapas del parto
1) La yegua presenta contracciones uterinas involuntarias y comienza la dilatación del cuello uterino. Los síntomas son similares al cólico. La yegua suda mucho, se pasea de un lugar a otro, agita la cola en señal de molestia, se mira frecuentemente los costados y se acuesta y se levanta de forma repetida. Finalmente se produce la rotura de la bolsa de aguas. Esta etapa puede durar entre una y ocho horas.
2) Acostada en el piso, la yegua comienza a pujar, pudiendo emitir fuertes quejidos. Estos esfuerzos voluntarios complementan y amplifican las contracciones uterinas involuntarias.
Primero salen las manos del potrillo (es interesante ver que en este momento la yegua puede levantarse y acostarse nuevamente), luego aparece la cabeza. El resto del cuerpo sale con mayor facilidad.
Cuando el potrillo ha salido completamente comienza a moverse y librarse de la membrana amniótica con la que sale recubierto, el cordón se rompe solo. Hasta aquí habrán pasado aproximadamente 15 a 30 minutos. La yegua se quedará recuperando fuerzas por varios minutos, luego comenzará a lamer a su potrillo y estimularlo para que se levante y busque sus mamas, esto podría demorarse hasta una hora. En estado libre o salvaje es el semental el que estará pendiente del cuidado de la yegua y su futuro descendiente.
3) La tercera etapa corresponde a la expulsión de la placenta, lo que se producirá entre 30 minutos y tres horas luego del nacimiento, previamente habrán unas breves contracciones.
Te dejo el enlace a un hermoso video del parto de una yegua en estado salvaje.
Referencias bibliográficas:
- Luz Aguilar Espinosa (2008). “El caballo: características, educación y cuidados”
- Jo Bird (2004). “Cuidado natural del caballo”
- Cristina Rodríguez Fischer (2023). “Enciclopedia del caballo”
